Cirugía #2 28 de enero 2020

Martes 28 de enero 2020 

Bueno ya preparado psicologicamente para esta cirugía, me habían asegurado que iba a estar el Dr. Fletes. 

Llegaron mas puntual que antes a traerme al cuarto y llevarme a quirófano. Esta vez me ingresaron más rápido al quirófano y dentro del equipo médico estaba el Dr. Fletes para mi alivio. 

El doctor que me había operado hace 4 días se me acercó a la camilla para darme las gracias por confiar en ellos que no me preocupara y que todo iba a salir bien. Tremendo descaro pensé yo, por nada bueno estaré de nuevo aquí con un pie sobre la tumba.

Empezó el mismo procedimiento, signos vitales, etc. Se me acercó el anestesista con unas inyecciones grandes que solo había visto en los picapiedras por el tamaño. Esta vez no había mascarilla para anestesia. Empecemos, exclamó; y procedió a inyectarme en la canalización ese líquido blanco, que inmediatamente sentí recorrer mi cuerpo y un sabor horrible invadió mi boca y sentí el alma dejar mi cuerpo. En ese momento solo pensé en que había sido mucho y que había llegado mi momento. Sin duda una de las peores experiencias de mi vida; no pude pensar más que en mi familia, en mi hijo y en mi esposa viuda tan pronto.

Nuevamente me desperté en sala de recuperación, con un dolor terrible y con la sensación que nuevamente había recibido otra paliza de la MMA. Sobreviví pensé, luego el dolor me recordó lo que era estarlo. Luego de unos buenos minutos de gritar de dolor pidiendo que me pusieran algo, lo hicieron. Esta vez eran las 12:30PM. Me sentía muy despierto, nada comparado con la intervención anterior. Me llevaron nuevamente a tomarme las radiografías y posteriormente al cuarto. Llegué a las 3PM al cuarto.

Me sentía muy débil y con mucho sueño aunque con buen estado de ánimo.

Esa noche no logré dormir, entre dolor, ansiedad, preocupación de saber que me dirían los médicos.

Lo que si es que me sentía mejor que la primera cirugía, ya no me dolían los glúteos, y podía sentir mi pierna nuevamente.

El miércoles 29 de enero la misma rutina, baño, etc.

Llegó el equipo médico esta vez liderado por el Dr Fletes sub especialista en cirugía de columna, me explicó que se había realizado una cirugía de revisión, que me habían extraído el disco herniado, colocado la caja intersomática y realizado la fusión de L5-S1.

Al consultarle porqué me habían tenido que operar nuevamente solo indicó que no sabía que había pasado en la primera cirugía ya que el no había participado.

Y si no participó porqué no canceló la cirugía?, pensé para mi mismo.

Me levantó de la cama, me colocó la faja lumbar y me ayudó a caminar. Esta vez me tomó 3 veces más esfuerzo poder levantarme y dar esos pasos. Estaba con anemia y me sentía débil.

No olvides tu donación, este sitio es para personas como tu y como yo, cuyo mejor recuerdo de la niñez era cuando no nos dolía la espalda.

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